
La pandemia COVID-19 ha llegado a cada rincón del mundo, pero, sin duda, ha afectado de forma especialmente violenta a las zonas desfavorecidas del planeta. La campaña #Seguimos se hace presente en aquellos lugares y países donde la pandemia no ha hecho más que empeorar situaciones ya graves de desigualdad social, a fin de paliar sus consecuencias mediante proyectos de Cooperación Internacional.
Kenia
Es el caso del proyecto llevado a cabo en Kenia. En este país la incidencia del COVID volvió a aumentar en 2021 alcanzando su pico entre finales de marzo y principios de abril, momento en el que el presidente decidió volver a instaurar la prohibición de desplazamientos en las zonas más afectadas, entre las que se encuentra Nairobi, lugar donde se lleva a cabo el proyecto de #Seguimos.
St. Joseph development programmes
La parroquia católica San José Obrero está ubicada en las áreas de asentamientos informales de Kangemi, dependiente de la Arquidiócesis de Nairobi. La parroquia, que fue establecida en 1985 por los Padres Jesuitas de la Provincia de África Oriental, cuenta con una oficina de Programas de Desarrollo para gestionar obras sociales apostólicas tales como un programa de VIH/SIDA, una Escuela Secundaria o un proyecto de mujeres.
Gran parte de las familias de Kangemi sufrían ya de pobreza extrema antes del inicio de la pandemia que no hizo más que empeorar su nivel de vida y su posibilidad de acceder a servicios básicos. Por eso, desde la llegada del COVID-19 se trabaja para mejorar la calidad de vida de aquellas personas especialmente afectadas por sus consecuencias. Hasta el momento, con el proyecto se ha logrado:
- Distribuir kits higiénicos (compuestos por mascarillas y jabón) a 300 familias.
- Instalar 3 puntos de lavado de manos en Kangemi, en lugares cercanos a las escuelas.
- Distribuir kits alimentarios (arroz, harina, aceite, sal, azúcar y legumbres) a 300 familias.
- Ofrecer sesiones de acompañamiento psicosocial a estas 300 familias.
Una de las personas acogidas en este proyecto es Wivine Kongolo, una mujer refugiada de la República Democrática del Congo, madre de tres hijos menores, que forma parte de un taller de la parroquia de San José Obrero.
“Mi vida ha sido muy dura. Durante mucho tiempo me han faltado recursos que poder proporcionar a mis hijos. La entrada del COVID en el país ha hecho empeorar mi situación. A mis hijos les ha faltado comida. A veces, incluso, el propietario nos dejaba fuera de mi casa por atrasos en el alquiler”.
En su lucha contra la pobreza, la parroquia trabaja por colmar necesidades tanto a medio como a largo plazo, de tal manera que ofrece bienes de primera necesidad y, a través de un enfoque sostenible y multidimensional, busca lograr un empoderamiento económico y educativo para transformar las vidas más vulnerables, pero perfectamente capaces.
“La ayuda recibida ha cambiado mi vida y la de mis hijos. Nos ayudan con el pago del alquiler y nos dan comida. Ahora mis hijos ya no pasan hambre. Aún sigo luchando con una enfermedad, pero el dolor se reduce en comparación con el pasado. Incluso mi hija, de 13 años, está recibiendo formación en higiene femenina, taller que acompañan con kits menstruales”.
El acceso a servicios sanitarios en esta zona, incluso en medio de una pandemia mundial, es preocupantemente escaso, pues la falta de ingresos no permite pagar ni tratamientos ni servicios preventivos.
“Además de ayudas con el pago del alquiler y comida, nos ofrecen productos sanitarios (jabón de manos, productos de limpieza para el hogar, mascarillas, desinfectantes…). Nos ofrecieron también un curso para aprender a protegernos del COVID”.
La parroquia San José Obrero continúa trabajando con el foco puesto en mejorar el acceso a la educación, a la atención sanitaria y proporcionar un apoyo nutricional y psicosocial a los vecinos de Kangemi.
“Nos han tratado como hermanos y hermanas. Sin su ayuda no habríamos podido atravesar esta pandemia. Pido a Dios que les bendiga y les llene de amor para que puedan llegar a más personas con dificultades en sus vidas”.
Con la campaña #Seguimos, la Compañía de Jesús en España continúa ofreciendo atención a las necesidades de la población más vulnerable que sufre los efectos de la crisis derivada de la pandemia de COVID-19. Entra en seguimos.jesuitas.es y colabora para que la ayuda llegue a quienes más lo necesitan.